“En los últimos meses hemos advertido que en algunos centros privados se agudizó la crisis con retrasos en el pago de salarios, reducción de tareas y hasta suspensión en las actividades. Los empresarios del sector tienen que entender que los derechos de los trabajadores deben ser respetados, más allá de los inconvenientes financieros “explicó el secretario general del gremio y prosecretario de Finanzas de la FATSA, Pedro Borgini.

Desde ATSA-La Plata (con representación en  43 distritos de la Provincia) aseguraron que en el Sanatorio Dolores, ubicado en ese distrito, la situación es “crítica” porque 60 trabajadores vienen padeciendo extendidos atrasos en el pago de sus salarios. El secretario general  de esa delegación por ATSA-La Plata,  Horacio Sotelo, explicó que el conflicto lleva varios años y que a la fecha “recién se completa el pago del aguinaldo que venció en junio y todavía vienen percibiendo remanentes remunerativos de 2013”.

Por su parte, Borgini recordó además que en la clínica POLIMED, de Tres Arroyos, ATSA-La Plata mantiene un fuerte apoyo a los más de 50 trabajadores que luchan por sus fuentes laborales, luego que los empresarios decidieron –hace más de cinco meses- abandonar el establecimiento. “Por la gestión del gremio y la cartera laboral local  muchos trabajadores pudieron ser reubicados en clínicas de la zona y seguimos acompañando a quienes decidieron resistir con la ocupación del edificio, a la desidia de los empresarios que huyeron sin importarles dejar en la calle a familias de la sanidad” dijo el dirigente de ATSA-La Plata.

Situaciones similares fueron detectadas en Necochea, con los conflictos vigentes  con los propietarios de las clínicas Cruz Azul y Regional. En la capital bonaerense, sigue sin resolución el cumplimiento en tiempo y forma del pago de salarios en el sanatorio San José de Villa Elisa, a la entrada a La Plata