Indicó que el taquígrafo traduce a signos lo que se dice en los discursos durante las sesiones, pero también son llamados a otras reuniones que necesitan ser registradas.

Tienen un papel similar y complementario al de los escribanos. Mientras están en el Estado no necesitan la firma de un notario, pero sí, si concretan un trabajo en el ámbito privado.

En torno al trabajo en el Concejo, Pinochi recordó que hay taquígrafo en el Cuerpo local desde 1947.

Está en condiciones de jubilarse Ramiro Cascio, actual director, y quedaría Marina Linares, que también fue formada por él en el 2011, afirmó.

Pinochi está preocupado, dijo, porque no se pierda la tradición y la profesión.

Por último, al ser consultado por cuál es su mayor recuerdo en torno a un lugar, sesión, o momento en el que haya agradecido por haber sido parte, relacionado con su trabajo, mencionó el año 1983.

Habían pasado varios años con el Concejo cerrado, por la dictadura, y ninguno de los electos recordaba paso a paso los procedimientos, por lo que le tocó hacer de taquígrafo y de secretario al mismo tiempo.

Pero es algo que lo emocionó, aclaró, por la vuelta de la Democracia.

El curso se dictará desde el martes 6 de agosto, martes y jueves de 14 a 16 horas en la sede del Concejo, Alsina y San Martín. La inscripción se sostiene diariamente durante las mañanas en ese mismo lugar.