Un anticipo de esa decisión oficial brindó en las últimas horas la ministra de Economía Silvina Batakis, cuando indicó que las comunas recibirán más recursos que el año pasado producto de un incremento de las metas recaudatorias de la Provincia y la coparticipación del Fondo Educativo nacional que este año no se distribuyó entre los distritos.

“Será un presupuesto muy ajustado que no permitirá la creación de ningún fondo adicional. Y por otra parte, como dijo Batakis, se prevé que los municipios tengan recursos superiores”, le dijo a este diario una de las espadas sciolistas en la Legislatura.

La instrucción del mandatario es que el proyecto que gire el Ejecutivo sufra mínimas modificaciones en su paso por ambas cámaras legislativas. Pero para conseguir ese objetivo, deberá convencer a varios legisladores del oficialismo que venían trabajando con intendentes en la creación de un fondo afectado que diera respuesta, al menos en parte, a los gastos que demandan la atención de servicios que se han tomando en sus manos los distritos como, por ejemplo, distintos aspectos vinculados a la seguridad pública.

No sólo eso: también deberá el sciolismo lidiar con legisladores de la oposición, en particular radicales, que suelen liderar reclamos de fondos para sus intendentes.

Según trascendió, el sciolismo en la Legislatura puso manos a la obra en busca de sumar voluntades en procura de que el proyecto de Presupuesto no se modifique en demasía. Y en ese sentido, ya se registraron contactos con sectores de la oposición.

“Si quieren más fondos, que lo vayan a ver a De Vido”, fue la reflexión con tono de duro reproche hacia intendentes oficialistas que escuchó uno de los diputados de la oposición que fue sondeado por el sciolismo. “Y si no, que aumenten las tasas”, fue el otro comentario.

En la Gobernación, en rigor, existe una fuerte molestia por la forma en que la Casa Rosada “puente” a la Provincia en la asignación de obras para los municipios, que otorga en forma directa a los intendentes y que se definen en reuniones mano a mano con el ministro de Planificación, Julio De Vido.

Pero la tarea para las espadas sciolistas en la Legislatura no parece sencilla. Por lo pronto, el presidente de la Cámara de Diputados, Horacio González, adelantó que el bloque oficialista haría consultas con los jefes comunales antes de votar el Presupuesto.

Lo dijo, en un claro mensaje, luego de un encuentro con intendentes en Casa de Gobierno del que, incluso, participó el propio Scioli.

Tras esas afirmaciones de González, el diputado sciolista Iván Budassi adelantó que no se haría esa ronda de consulta con los jefes distritales. Un intención que, ahora, se robusteció con la inminente llegada del proyecto a la Cámara baja.

Por ahora, las gestiones con la oposición no pasaron de la categoría de sondeos. Pero los bloques no oficialistas han acumulado una fuerte dosis de malestar por lo que, definen, como “incumplimientos” por parte del Frente para la Victoria.

De hecho, los opositores juntaron 48 voluntades -la mayoría de los integrantes de la Cámara baja-, para impulsar un proyecto de ley en busca de que la Provincia denuncie el Pacto Fiscal.

“Hay intención de avanzar con este tema y con otras acciones conjuntas”, advirtieron varios opositores en las últimas horas.

Con un proyecto de Presupuesto que el sciolismo define como “muy ajustado”, la intención es que no se avance en la creación de fondos que rompan con ese supuesto equilibrio. Financiar una partida extra supondría, además, más endeudamiento o una presión impositiva adicional que en la Gobernación prefieren evitar.