Esta nueva forma de fraude se vale de diferentes técnicas publicitarias en la red, que propician el contacto directo del consumidor con la supuesta financiera, que ofrece préstamos sin exigencias y/o a muy bajo interés.

Otra modalidad de engaño muy común es que por estos mismos medios  les comunican que han recibido un premio u otro beneficio.

La enorme publicidad y la facilidad de contactarnos que dan las redes sociales, nos expone a los peligros de caer en  la tentación de obtener créditos rápido y de manera sencilla por internet, sin moverse de casa.  Sin embargo esta “facilidad” puede  finalizar en un enorme dolor de cabeza sin recibir el dinero y con deudas.

La manera de actuar de estas personas comienza, con la seducción publicitaria por medio de la red o bien por el contacto por cualquier medio, sea teléfono, WhatsApp, mail etc. A partir de allí nos solicitan nuestros datos y comienza un mecanismo por el cual nos llevan a tramitar uno o varios préstamos y “depositar distintas sumas de dinero a diferentes cuentas de diferentes bancos a modo de comisiones o impuestos”. Asimismo nos inducen a dar claves o solicitar el sistema de Token, mediante el cual se hacen de las más diversas operaciones que terminan por perjudicar a los consumidores, quienes se convierten en deudores por un crédito que nunca recibieron.

Otra modalidad es la que se realiza vía mail comunicándonos que fuimos beneficiarios de un premio. En esos casos los mails son en otro idioma o traducidos con traductores de Google con errores de ortografía y/o gramática (remitentes Jason, Melany, o hasta el nombre de una empresa conocida) nos solicitan datos personales y bancarios y luego nos piden un depósito para liberar el premio.

Algunos consejos a tener en cuenta:

Tengamos siempre presente que no estamos seguros de quien está del otro lado de la línea.

Nunca entregar dinero anticipado. La regla de oro, ninguna empresa de servicios financieros que se precie de seria pide anticipos para trámites, gastos, inicio de préstamo, cuota social de mutual o nada que se le parezca. Si alguien le pide dinero, para luego darle dinero, hay que desconfiar.

Cuidado con Facebook. Es habitual encontrar empresas que anuncien sus créditos en Facebook pero algunos aprovechan la zona de comentarios y ofrecen allí sus ofertas, muchas veces confundiendo a los usuarios. Desconfíe y asegúrese de estar conversando por Facebook con la empresa y no con un individuo que se metió en la conversación.

Más cuidado con Facebook. Si la empresa recibe cientos o miles de preguntas o inquietudes en su “fanpage” y los mismos no son respondidos, claramente es un indicio de que se trata de una empresa que no se interesa por sus usuarios. Lo lógico debe ser que tanto las personas que aprueban para un préstamo, como las que son rechazadas, merecen el mismo trato digno y ser informadas adecuadamente por qué razón no aprobaron. Si ve mensajes sin responder, desconfíe.

Muy importante: empresas serias y empresas dudosas. Estamos hablando de dinero y la confianza es fundamental a la hora de solicitar un préstamo por internet. Si la empresa no posee debidamente aclarada la dirección de sus oficinas (aunque atiendan solo online ), no posee un teléfono, no indica  el nombre de la Sociedad y su CUIT , incluso su código de AFIP, son todas razones para desconfiar.

Trayectoria. Siempre que sea posible, indague por la reputación de la empresa por sus propios medios. Si esto no es posible, lea la sección de “quiénes somos” de la página web de la empresa. Si allí encuentra información concreta con nombres, personas responsables, fotos de las oficinas, domicilios y datos concretos de la empresa se puede seguir con el trámite. Por el contrario, si lo que lee a usted le parece “chamuyo”, como ” Somos una empresa abocada al cliente con 50 años en el mercado”, la empresa no indica su CUIT con formatos reconocidos, son firmas extranjeras, sus responsables no dan la cara o no encuentra un solo dato concreto, desconfíe.

La Dirección de Defensa al Consumidor les brinda asesoramiento, si tiene dudas consulte antes de iniciar o concretar la operación,  a través del 418477/78 o bien a través del correo mediació[email protected]. Las oficinas se encuentran ubicadas en Coronel Suárez 2774.