Benassi indicó que dentro de la entidad hay más de una visión sobre la situación.

“Hay sectores que están preocupados,  como los que pertenecen al calzado o la industria del cuero y los textiles, y otros que no tienen esa preocupación”.

 Dentro del sector calzado y marroquinero las expectativas que tenían de mejorar tecnológicamente ahora están volcadas  a la s importaciones. Como sector va a seguir funcionando y no va a tener la mayor cantidad de mano de obra como si se hubiera incorporado tecnología, evaluó

El sector productivo está amesetado.

Agregó que un sector que no representan que es la construcción, tampoco tiene una expectativa demasiado favorable.

Si bien es mejor que el año pasado,  no va a llegar a lo que existía hace 4 ó 5 años atrás.

La caída de puestos de trabajo o la disminución de las fuentes laborales está en relación con las grandes empresas. La pequeña y mediana empresa trata de mantener a la gente para esperar un futuro más promisorio que le permita mantener en lo que ha invertido en capacitación.

Por otro lado, expresó que “ Si uno quiere buscar un sector con expectativa favorable, todos los que emprenden , los que despliegan en su vivienda o donde están radicados, lo hacen con una fuerza y una expectativa favorable de envidiar”

“El trabajo que hacemos con emprendedores de la provincia de Buenos Aires, nos puede permitir observar que hay una cantidad de gente que quiere incorporar nuevas metodologías de trabajo”.

“Lo que se nota es que el emprendedor llega a tomar conocimiento de algunas cosas o a preguntarse algunas cosas para desarrollar su emprendimiento a partir de tener dificultades de encontrar mercado”.

“Lo que necesitan es capacitarse en comunicación y eso es lo que brinda”