Con respecto a la primera, es un equipo fundamental en una unidad de tratamiento intensivo neonatal.

El equipo genera calor para los bebés y es utilizado especialmente por prematuros o recién nacidos que no pueden mantener una temperatura neutra y necesitan ser trasladados, ya sea dentro del hospital hacia los diferentes servicios (por ejemplo de quirófano hacia neonatología) o fuera del mismo.

Con respecto a traslados fuera del hospital, el equipo posee la cualidad de tener camilla retráctil incluida, esencial para el traslado en ambulancia para mayor confort del neonato.

Técnicamente, la incubadora es marca Medix, modelo TR-2000. Posee un panel de control a prueba de agua, simple e intuitivo, luz de examen de LEDs y ofrece la posibilidad de incorporar equipamiento adicional como monitores, respiradores y bombas de infusión. La batería es de alto rendimiento y tiene gran autonomía: proporciona hasta 6 horas de duración y permite a la incubadora recorrer largas distancias o afrontar demoras inesperadas, sin comprometer el entorno del bebé.

En cuanto a la servocuna, es un equipo que permite el acceso inmediato al recién nacido. Facilita la realización de los procedimientos durante los primeros momentos de vida del bebé, manteniéndolo en óptimas condiciones ambientales.

Entre algunas características técnicas, la servocuna presenta un modo de temperatura de piel y otro manual, con sensores de alta precisión (+/- 0.1 ºc), asegurando un ambiente térmico adecuado. Su modo de pre-calentamiento posibilita la preparación del equipo a la espera del nacimiento del bebé. Cuenta con un sofisticado sistema de alarmas, que notifica a los médicos cuando se presenta un problema en la condición térmica del niño.

Su calefactor puede girar hacia un lado durante los procedimientos sin dejar de ofrecer soporte térmico al nacido.