La travesía de Juan Pedro Epstein, un abogado de 25 años graduado en la Universidad Nacional, y su novia Sofía Leprati, terapista ocupacional, tendrá a la emblemática ruta Panamericana como eje de un itinerario “abierto”, cuya culminación tomará al menos un año.

“La idea es completar el circuito de ida y vuelta en doce meses, pero los tiempos reales y las ciudades en que hagamos escalas los va a marcar el ritmo del viaje y lo que encontremos en cada destino” explica Epstein: “la Panamericana es una referencia, pero también nos acercaremos más al Pacífico en varios tramos, como el de la Costa Oeste de los Estados Unidos”.

El platense no desconoce las vicisitudes de la vida en la ruta; desde que partió en soledad como “mochilero” a Brasil ocho años atrás, acumuló múltiples experiencias y fue alimentando el ambicioso sueño de llegar por tierra hasta el extremo noroeste del continente.

La poderosa gravitación de ese territorio de osos y pioneros, lagos cristalinos, ríos caudalosos y bosques interminables lo llevó a decidirse a tomar licencia en el estudio jurídico en el que trabaja, e invitar a su novia a acompañarlo en la aventura.

VIVIR EN LA RUTA

La pareja se halla acondicionando por estos días una camioneta 4x4, a la que se le quitarán las butacas traseras para crear un espacio que permita dormir allí. Una cocina desmontable y una estantería para provisiones completarán la “mini-motorhome” que partirá del barrio aledaño con el Batallón 601 de Comunicaciones citibelense en el mes de septiembre próximo.

La movida será financiada con ahorros y “lo que vaya saliendo durante el viaje; he trabajado de mozo, piletero, jardinero y lavacopas”, advierte Epstein: “además, un amigo me está explicando nociones de mecánica ligera y llevaremos repuestería básica para pasar la menor cantidad de sobresaltos posible”.

El viaje será documentado online y sus alternativas narradas en una página web que toma forma. “Sofía tiene la intención de observar cómo se abordan el trabajo comunitario y el tema social en otros países, así que el material irá en parte por ese lado” señala el abogado platense, quien está en contacto con una pareja argentina que llegó en combi hasta México y sigue foros de viajeros para mantenerse actualizado en materia de rutas y trayectos.

La ruta Panamericana es considerada la más larga del mundo; está integrada por una serie de enlaces viales entre Ushuaia, Tierra del Fuego y Prudhoe Bay, al norte de Alaska, que superan los 30 mil kilómetros y pueden llegar a más de 40 mil sumando diferentes ramales.

El camino, que se comenzó a considerar como tal en la década de 1920, sólo se interrumpe en el canal de Beagle, donde es necesario tomar un ferry, y en el impenetrable “Tapón de Darien”, la zona fronteriza selvática y pantanosa entre Panamá y Colombia: allí, la mayoría de los viajeros motorizados opta por recurrir al transbordador entre Cartagena (Colombia) y Colón (Panamá).