Pero volverá a hacerlo tras 17 días consecutivos sin clases a causa de la mayor huelga docente en décadas. Para los chicos y los padres, será un día especial.

La propuesta final que aceptaron los gremios contempla aumentos que van de 27,60 a 38,70 por ciento, de acuerdo al cargo y la antigüedad, y cuenta también con la aceptación de los docentes secundarios de UDA y los privados de Sadop, que también integran el Frente Gremial.

La oferta establece para el maestro de grado sin antigüedad un incremento de 38,70 por ciento, casi 8 puntos más que la rechazada de 30,90 por ciento, y para la categoría maestro de grado con 17 años de antigüedad la suba, de marzo a agosto será de 31,50 por ciento, lo que elevará el sueldo de 4.656 pesos a 6.123. Suteba y FEB, dos gremios que integran el Frente Gremial, realizaron ayer sus respectivos plenarios, donde se votó en favor de levantar la medida de fuerza y dar por finalizado el conflicto.

 Lo cierto es que el sábado por la mañana terminó de confirmarse lo que el viernes, tras la reunión paritaria entre el gobierno bonaerense y los gremios docentes, se fue convirtiendo en una sensación generalizada: la nueva oferta de aumento salarial conformaba a los maestros y, por fin, las clases darían comienzo.

En la víspera, el plenario general del Suteba y el congreso extraordinario de la Feb, los dos principales sindicatos docentes de la Provincia, aprobaron la propuesta y, luego de más de tres semanas de duras expresiones hacia la postura del Ejecutivo en el conflicto, los referentes de esas entidades dijeron lo que todos querían escuchar: “Hay clases”.

Este acuerdo le mete presión a los gobiernos, como el de Mendoza, que aún no acuerdan con los docentes.