En relación a ello se brinda información para concientizar a la sociedad sobre la importancia de mantener conductas saludables para conservar una buena calidad de vida; así como también acerca de los perjuicios a la salud que causa la obesidad.

Asimismo, se proponen diversas actividades tendientes a reforzar esta campaña de concientización.

En este sentido, el Secretario de Prevención y Atención Sanitaria, Ramiro Borzi, destacó: “En el marco de las actividades de promoción de salud que fomentamos desde esta Secretaría, invitamos a nuestra población a participar de las caminatas que se realizan desde la Secretaría de Desarrollo Social, a través de la Dirección de Deportes Municipal. También invitamos a la comunidad a participar de un nuevo taller de nutrición que realizarán especialistas de nuestro sistema de salud pública, brindando consejos acerca de una alimentación saludable”.

 “Tiene que quedar claro que el exceso de peso va mucho más allá de lo estético, debemos mantener un peso saludable para tener una buena calidad de vida y además, para prevenir otras enfermedades crónicas” explicó la Licenciada en Nutrición María Eugenia Maumús.

Efectivamente, el sobrepeso y la obesidad son factores de riesgo para numerosas enfermedades crónicas, entre las que se incluyen la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el cáncer.

Se considera obesidad a una acumulación anormal o excesiva de grasa que se torna perjudicial para la salud.

Una forma simple de medir la obesidad es el índice de masa corporal (IMC), esto es el peso de una persona en kilogramos dividido por el cuadrado de la talla en metros. Una persona con un IMC igual o superior a 30 es considerada obesa y con un IMC igual o superior a 25 es considerada con sobrepeso.

“Para prevenir la obesidad y conservar un peso saludable que nos permita gozar de un buen estado de salud psicofísico, hay que tener en cuenta dos pautas muy sencillas: una alimentación saludable y actividad física regular. Debemos darnos la oportunidad de elegir opciones saludables e influir en los hábitos y las preferencias dietéticas de los niños” sostuvo la Lic. Maumús.

Respecto a la nutrición, se recomienda reducir la ingesta total de grasas, aumentar el consumo de frutas, hortalizas, legumbres, cereales integrales y frutos secos, y reducir la ingesta de azúcar y sal.

Asimismo, es necesario el desarrollo de actividad física regular. La realización de actividades físicas de intensidad moderada durante 30 minutos al día la mayoría de los días de la semana reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes y cáncer de colon y mama.

El apoyo de la comunidad y del entorno es fundamental para influir en las elecciones personales y evitar la obesidad.