El 1º de julio de 1974 fallecía el general Juan Domingo Perón, líder del Movimiento que permenece como guía para la felicidad del pueblo argentino.
Su figura emergió tras décadas de frustraciones e infamias, para sentar las bases de un modelo de la comunidad organizada, donde los habitantes de este suelo se realizaran con trabajo y estudio, en un proyecto nacional.
Hoy transitamos una etapa de profundización de la justicia social, que retomó Néstor Kirchner en 2003, desde la profundidad de una crisis que devoró los sueños de los argentinos. Los peronistas estamos comprometidos con el sostenimiento de lo logrado en una década, pero también con la consolidación de un proyecto superador, con mayor calidad institucional, con más seguridad en las calles, con una canasta básica al alcance de todos y con una mesa familiar donde se puedan compartir opiniones, comunes o divergentes, pero donde el odio no tenga lugar para dividirnos.
Perón nos enseñó que primero está la patria, y ese es nuestro horizonte, convencidos de que el Frente Renovador, con Sergio Massa en el País, con José Eseverri en Olavarría y con millones de hombres y mujeres de buena voluntad, podrá continuar esta senda hacia una Argentina plena, merecedora de haber tenido la bendición de ser la tierra donde vivió Juan Domingo Perón.