En las primeras horas de la mañana de este viernes, el municipio envió un parte de prensa ratificando la clausura preventiva del establecimiento panadero, por parte del Juzgado de Faltas municipal, que conduce la Dra. Elda Donatelli.

Además añaden que habrá decomiso de mercadería y que la clausura se extenderá hasta tanto se de cumplimiento con las tareas de limpieza y acondicionamiento.

Indican que permitirán el ingreso a los propietarios, al sólo efecto que se lleven a cabo las tareas de limpieza, aunque no se podrá desarrollar actividad comercial alguna.

Los medios de comunicación fueron citados por Ottino para media mañana en la cuadra de la panadería, donde llegaría la jueza, el director de bromatología, Federico Larroudé y un escribano, Alfredo Catanzaro, convocado por el dueño de la firma.

Por otro lado, desde el Consejo Escolar, ratificaron la recepción de la denuncia en segundo término, ya que desde el establecimiento educativo que habría recibido productos contaminados, remitieron la prueba de manera urgente a Bromatología, y después denunciaron en el Consejo.

De todos modos, establecidas las comunicaciones de rigor entre los consejeros y Bromatología, se dispuso la realización de una compulsa de precios entre el resto de los proveedores de panificados para cubrir la zona en la que estaba trabajando Los Trigales.

Con esto, quieren decir que los chicos nunca se quedaron sin panificados.