Somos mujeres. En plural. Diversas. No somos todas iguales. En eso reside nuestra riqueza. Tenemos distintas ideas y visiones del mundo. Nuestras historias de vida son distintas. Nuestras formas de hacer son variadas. Nuestros sueños son distintos. Cada una de nosotras tiene sus proyectos, aspiraciones y pasiones. 

Somos mujeres y tenemos algo en común. Somos mujeres radicales. Tenemos vocación de servicio. Creemos en la política como lugar de encuentro, de ideas y acción.

Transformamos realidades. Podemos construir comunidades más sostenibles. Nos inspira imaginar un mundo sin violencias. 

Hoy como ayer y siempre que el poder amenace con destruir, no dejaremos declinar nuestra lucha. 

Nosotras las mujeres radicales, en paz. Decidimos caminar sin dar un paso atrás.